El tiempo pasa, y el final de este capítulo se acerca. Hoy ya se han visto los primeros últimos pasos, los últimos descansos, las últimas bromas de estudio. Dicen que vendrán otros, que todo se renueva, pero no necesito lanzar LaMoneda para saber que hay cosas que no podrán ser mejoradas.
Ayer hablé de Il Padrino y de La Delegada. Figuras clave. Personas clave. Mañana ya estarán más cerca de lo que buscaron cuando entraron. Y se lo merecen. Aunque entre tú y yo, casi hubiera preferido que se quedasen un añito más como mínimo, sinceramente, se merecen acabar por la puerta grande. Sinceramente, y sin peloteo (lo prometo), les debo mucho.
También hay más nombres e historias por ahí, tan pequeño parecía esto para que pasaran tantas cosas. Parece lejos el día que Il Padrino me señaló a uno por ahí y me dijo: "Ese que hace chasis contigo, es ese de ahí". Podemos llamarle Josep, al que tantas veces le he repetido esta semana que tenga cuidado no vaya a verle por mi clase el año que viene. Tenerle al lado el primer año en el equipo fue clave, sentirse útil pese a no saber ni tan siquiera lo que era un Momento de Inercia dice mucho de Josep. Luego se nos fue por ahí, a la otra punta del Mundo. Pero ya de vuelta, no lo han cambiado. Algo habrá hecho para merecerse una oficina privada en el pasillo...
No sólo esta gente se le nota "buena gente", sino que lo son. Si les pides ayuda, te la darán. Y aunque no te la pidan, ahí están. Apuntes, consejos, todo con conocimiento de causa. Puedo decir que gran parte del mérito de varios exámenes se lo merece la ayuda de esta gente. Aunque ella le de el mérito a otra persona, aunque diga que no son para tanto... Sólo el gesto de ofrecer su ayuda, ya demuestra que he tenido suerte estando cerca de ellos. Los apuntes bien merecían invitarla no una, ni dos, sino muchas meces más. Guardaré con mucho cariño ese detalle, y la ayuda contínua. Que a día de hoy, cuando ya está más cerca de la salida, sigue ofreciendo. . Espero que las "flores en florero de mina " (c) sirvan como pequeño homenaje. "Titular en las farras, y en clase". En pocas semanas desde el otro lado del charco, le deseo lo mejor.
Los consejos no sólo me han valido para las clases y exámenes, incluso para algún examen de idiomas. Frases en alemán para meter en la redacción, sin duda que marcaron la diferencia y bieen merecieron el aprobado. Fueron de los que siempre saludaban, a pesar de ser el "mico" de primero. Siempre saludaban al llegar y al irse. Siempre. Luego llegarían días clave, ElDíadelPatrón, las fiestas... Y con sus consejos, a esas horas de la noche, aprendes tanto o más que resolviendo un problema. Consejos que a día de hoy guardo y trato de poner en práctica. Porque quiero llegar allí, así.
No podía faltar. Ni el nombre hace falta para saber a quién me refiero. Hace un par de años, de la nada apareció. Como en los mejores cuentos. De la sorpresa, a la curiosidad. La curiosidad mató al gato, pues a mi casi me quita la motivación. Menos mal que los consejos de mis coachers me sacaron de la oscuridad. Luego vino su retorno, como en las películas, y parecía que nada había cambiado. Y lo que parecía que iba a ir peor, se transformó. De repente. De la nada. Lo llamaría Karma, destino. Pero no fue azar. Una demostración de que todo puede cambiar, y cambia a mejor si así quieres que lo haga. Lo que un día fue negro, se volvió blanco. Desde ese día hasta aquí ha llovido mucho, he escuchado muchas bromas, y he sido guiado por grandes coachers. Se le echará de menos, no cabe duda. Y es difícil que tan siquiera aparezca algo similar. Grazie mille. Ciao principessa!
No puedo cerrar esto sin mencionar al TeamBuilder, su aspersor inundó de diversión muchos momentos, y ahora ya incluso tenemos circuito cerrado de comunicación. Desde la tierra de Vorspruchn durch Technik, la Dirección le ha elegido. Todas... Vielen Dank! Carbonoman, tú por suerte todavía estarás cerca más tiempo que el resto. Anda que no nos quedan horas por delante con la máquina...
Es imposible mencionar a todos sin dejar de escribir. Es imposible. Pero esos recuerdos siempre seguirán en alguna parte. Ya sea mirando la zona en la que se sentaban, recordando fiestas en las comidas, o anécdotas que todos tenemos; estarán ahí.
Mañana cruzarán la puerta, y se irán. Para siempre de ahí abajo, porque se lo merecen. Decir que les deseo lo mejor se queda corto. Sólo espero que si necesitan algo sepan que por ahí estaré, en mi sitio. Espero que les vaya muy bien, porque se lo merecen. Porque me han ayudado, nos han ayudado. Y han hecho de esto, algo divertido. Algún día nos volveremos a cruzar, y podré continuar estos recuerdos.
Hasta entonces, que sigan siendo muy felices.
No hay comentarios:
Publicar un comentario